Los tonos son una de las partes del idioma chino que más cuesta a los estudiantes y, a su vez, una de las que menos tiempo se le dedica en el aula. ¿Por qué se tiende a pasar por alto esta característica tan propia del idioma chino? En los manuales, los tonos se suelen aprender al principio pero según se avanza de nivel desaparecen de los cuadernillos y no se vuelve a hacer hincapié en ellos. Parece que se da por supuesto que lo alumnos ya saben los tonos cuando en muchos casos la realidad es otra. Por lo que respecta a los estudiantes, las razones son diversas, por un lado es común dedicar mayor tiempo a otros aspectos del chino que aparentemente son más difíciles (como los caracteres); por otro, porque al no tenerlos en nuestro idioma nos resulta más difícil asimilarlos y más fácil pasarlos por alto; o, por último, porque hay quien piensa que comunicarse y tener fluidez hablando es más importante que decir bien los tonos.
Sin embargo…
A nivel comunicativo, en el idioma chino, es más importante decir bien el tono que pronunciar bien la palabra.
Muchas veces nos olvidamos de que el chino es un idioma tonal. Es tan sencillo como eso. En la Wikipedia los tonos se describen así:
En lingüística, el tono es la variación fonémica en la frecuencia acústica de una sílaba, es decir, un tono en el sentido lingüístico provee distinción semántica.
Esto quiere decir que para diferenciar el significado de una misma sílaba tenemos que prestar atención al tono en cuestión. En castellano existe algo parecido pero a nivel de frase: la entonación. Según cómo digamos una frase puede significar una cosa u otra.
En realidad los cinco tonos del chino (cuatro y uno neutro) son bastante distintos los unos de otros, pero si no les prestamos suficiente atención la comunicación puede verse muy afectada.
Siempre cuento la historia de cuando estaba en un restaurante y llevaba un buen rato esperando a que llegara mi sopa y le decía a la camarera que me trajera la sopa y ella no paraba de traerme sobres de azúcar. (Tanto sopa y azúcar se dicen ´tang´ solo que sopa es primer tono y azúcar segundo.)
¿Qué podemos hacer para mejorar nuestros tonos?
Lo esencial es tomar conciencia de que los tonos son una parte fundamental del chino; sin ellos la comunicación no es fluida, surgen barreras comunicativas que hacen que nuestro interlocutor tenga que prestar mayor atención a lo que estamos diciendo y, si sistemáticamente cometemos fallos que trunquen la comunicación, terminaremos con bastante sensación de frustración. ¿Por qué no me entienden? ¡No hacen ningún esfuerzo por entenderme!
Por tanto, aunque parezca una tontería, decidir desde ya que no podemos abandonar más este aspecto y que desde el momento que aprendemos una palabra nueva vamos a dedicarle el mismo tiempo tanto al carácter como a la pronunciación es crucial. Es un fallo muy común es dedicarle más tiempo a la escritura que a la pronunciación, ambos son importantes, pero en el caso de los tonos no existe ningún sustituto “fácil” como sería el pinyin para los caracteres. Si tomamos consciencia de este punto lo demás vendrá rodado ya que existen muchos ejercicios, técnicas para recordar y practicar los tonos y, también, distintas páginas web y apps especialmente dedicadas a este menester. (Haz clic en los enlaces para acceder a páginas con ejercicios sobre tonos).
¿Tienes problemas con los tonos? ¿Tienes algún truco para mejorarlos? Comparte comparte con nosotros tu sabiduría chinesca, ¡así mejoramos todos!
Un saludo,
玛丽